Del 27 de junio hasta el 3 de julio de 2022, un equipo de 40 personas de las universidades de Zúrich, Lausana y Humboldt de Berlín hizo una campaña de encuestas para el proyecto Rurican en La Palma. Trece estudiantes de la Universidad de Zúrich han escrito breves testimonios del viaje: este es uno de ellos, escrito por Luana Del Guercio.
¡Vamos a tomar un barraquito!
Querido lector, si ahora no entiendes dicha exclamación y te estas preguntado por el significado de esta bebida y no te surge ninguna idea, no te preocupes porque pronto lo descubrirás en las próximas líneas.
El barraquito es una bebida dulce de café sumamente popular en las islas Canarias; por lo tanto, si alguien te ofrece un barraquito, ¡degústalo! Alegrará tus momentos del desayuno o acompañará a tu bocadillo de papas asadas. Disfrutarás de su sabor peculiar y agradable, que atrae por sus colores variados. Se sirve por capas en vaso mediano o alto. Sus diferentes densidades de ingredientes están compuestas, del inferior al superior, de leche condensada, licor 43, café expreso y leche espumada. Al final, se decora con canela en polvo y piel de limón o lima.
Esta especialidad cafetera se asemeja al café asiático de Cartagena, en la Región de Murcia. Aunque ambas se preparan con los mismos ingredientes, el café asiático cambia la leche natural por coñac y añade granos de café a la mezcla. Se asume una relación entre ambas, dado que sus recetas son casi idénticas. El licor 43 es murciano y el café asiático apareció un siglo antes en Cartagena; por ende, es altamente probable que el café más emblemático del archipiélago canario derive de alguna manera del café asiático.
Su nombre, como cuenta la leyenda, apareció a mediados del siglo xx y se debe al cliente Don Sebastián Rubio, conocido con el apodo de «Barraco» o «Barraquito», quien siempre pedía un cortado con leche condensada en vaso largo, un vasito de Licor 43, piel de limón y canela en el bar Imperial de Santa Cruz de Tenerife. Esta historia quedó recogida en el Diccionario histórico-etimológico del habla canaria de Marcial Morera (2006 :199):
También se cuenta que ocurrió en el bar Paragüitas de Santa Cruz. Otras fuentes narran que el barraquito fue inventado por el camarero Don Manolo Grijalbo, kioskero según otros, de un establecimiento cercano al puerto de la ciudad que servía como punto de encuentro.Pues, querido lector, ahora que sabes su composición y su origen no hay nada más que degustar esta delicia, como hice yo en la foto.